La última milla de la paquetería pasa por un constante y creciente protagonismo en la cadena de suministro, alimentado especialmente por el alza de las compras online, situación que dibuja un escenario desafiante que requiere de una infraestructura de almacenamiento que se adapte a las nuevas exigencias de este formato de distribución.

«Realizar una gestión eficiente de esta área resulta crucial, pero la cadena de suministro que comúnmente conocemos en muchas ocasiones se encuentra obsoleta, y no cuenta con los recursos ni las infraestructuras necesarias para abordar las necesidades de los paquetes de los ciudadanos de una manera óptima y eficiente», señala Miguel Monreal, business development director de GLP.

Al respecto, Miguel Monreal, business development director de GLP, indica que cada vez son más las infraestructuras y estrategias que tratan de amoldarse a esta realidad y que muchos negocios están replanteando sus estrategias para poder adaptarlas a este formato de distribución.

Menciona que frente a este panorama, la inmologística se ha reinventado para responder a estos nuevos desafíos que se presentan por parte de la sociedad actual y sus cambiantes hábitos de consumo.

«Y es que la última milla, potenciada por el auge del comercio electrónico, ha impuesto nuevos desafíos al sector de la paquetería que solo pueden abordarse mediante una adaptación profunda de todas las áreas de la cadena de suministro», subraya.

Destaca que en este escenario la inmologística juega un papel esencial, evolucionando y adaptándose para satisfacer las necesidades de una distribución rápida y efectiva. Agrega que las nuevas instalaciones que se están desarrollando en la actualidad deben regirse mediante nuevas estructuras y estrategias, contemplando no solo la ubicación estratégica y la accesibilidad, sino también características que permitan maximizar la eficiencia de los procesos de última milla.

«La inmologística actual debe estar centrada en diseñar centros ágiles, con capacidad para adaptarse a las fluctuantes demandas del e-commerce y para manejar una gran variedad de mercancías que deben ser entregadas en tiempos cada vez más cortos», apunta.

Asimismo, asegura que la sostenibilidad se ha convertido en una demanda creciente por parte de los consumidores, y las instalaciones logísticas están respondiendo a ellas con la incorporación de diversas prácticas que abarcan desde la construcción de almacenes en terrenos brownfields (previamente urbanizados), hasta la implementación de sistemas energéticos eficientes.

«Es así como la inmologística no solo se está adaptando, sino que se está reinventando para satisfacer las demandas de un sector en constante evolución», dice. «La capacidad de respuesta de la inmologística frente a las nuevas exigencias que van surgiendo asegura así una adaptación del sector a las necesidades de cada eslabón que compone la cadena de suministro», finaliza.