Escrito por: Daniel Fernández Koprich. Presidente del directorio Cámara Marítima y Portuaria de Chile A.G.

En un mundo en permanente cambio, los desafíos de la industria marítimo portuaria imponen la tarea de entregar soluciones sostenibles para el sector, colaborando con el desarrollo económico y social del país.

Las condiciones favorables para el desarrollo de esta actividad se han mantenido, pese al surgimiento de iniciativas que, de materializarse, habrían afectado la eficiencia de nuestro comercio exterior.

En este año, en que conmemoramos los 80 años de Camport, se nos plantea como prioridad colaborar con las autoridades ante la creciente actividad delictiva que afecta al sector. El crimen organizado no solo resulta ser una amenaza para nuestra actividad, sino también para la convivencia nacional.

Entre enero de 2021 y febrero de 2023 se registraron 49 asaltos, en depósitos y terminales, cuyos daños directos han sido valorizados en US$ 8,7 millones. La dotación a cargo de la función de policía marítima equivale a 1 funcionario por cada 2,7 kilómetros de costa, lo que resulta insuficiente para fiscalizar y controlar la creciente delincuencia en el entorno del borde costero. Es evidente que se necesita fortalecer las atribuciones, recursos, tecnologías y coordinación de las entidades públicas responsables de la seguridad en terminales, depósitos y carreteras.

Este diagnóstico y la medidas propuestas por Camport para abordar este problema fueron acogidas en el informe de la Comisión Especial Investigadora de Seguridad Portuaria de la Cámara de Diputadas y Diputados, y serán efectivas en la medida que exista un trabajo coordinado de Aduanas, PDI, la Armada de Chile y las fiscalías, entre otros organismos de control y seguridad.

El proyecto de ley, que modifica las normas del cabotaje en Chile, es otro de los temas relevantes para la actividad. Es la ciudadanía la que finalmente asume el sobrecosto que implican las actuales normas sobre el cabotaje. El Congreso entendió el problema y recogió las observaciones y aportes a esta discusión. Esperamos que en el Senado se mejore la redacción del proyecto de ley de modo y así evitar futuros problemas eventuales de interpretación.

En cuanto a cifras, existen datos a los que debemos prestar atención. En el comparativo entre 2023 y 2022 del período enero-diciembre, las toneladas totales transferidas por nuestro sistema portuario bajaron un 4,8%, mientras que el valor en dólares cayó un 12,7%. En lo que se refiere a las toneladas totales de importación, estas decrecieron un 22,7% y su valor en dólares bajó un 11,1%. Estos datos muestran un debilitamiento de la actividad económica, de la cual el comercio exterior es un termómetro.

En el futuro inmediato, es urgente mejorar la eficiencia de los procesos logísticos, incluyendo las exigencias a las maniobras de atraque y desatraque de las naves en los terminales portuarios. El aporte coordinado de los servicios públicos del Estado y los actores del sector privado resulta fundamental.

Nuestros desafíos están identificados, y los esfuerzos deben dirigirse en continuar avanzando en el desarrollo económico y social del país, en este 2024 en que Camport cumple sus 80 años de existencia.