Frigoríficos y logística: Claves para la competitividad de la industria salmonicultora
diciembre 30, 2024
Escrito por: Admin L360
La exportación de salmón chileno enfrenta desafíos logísticos y de almacenamiento que ponen a prueba la competitividad del sector.
La industria salmonicultora, como segundo mayor sector exportador del país, enfrenta numerosos desafíos logísticos y operativos para mantener su competitividad en los mercados internacionales. Entre estos, destaca la necesidad de servicios especializados de frigoríficos y logística que aseguren el mantenimiento de la cadena de frío, la inocuidad de los productos y la eficiencia en los tiempos de entrega.
El crecimiento y adaptación a las demandas del mercado global que ha tenido la industria acuícola ha expuesto desafíos estructurales, especialmente en la gestión de la cadena de frío y el cumplimiento de normativas internacionales cada vez más rigurosas. Los frigoríficos y servicios logísticos juegan un rol central al permitir que el salmón chileno conserve su frescura y calidad desde las aguas del sur hasta exigentes mercados, como son los de Estados Unidos, Japón y Brasil.
Mantenimiento de la cadena de frío
El mantenimiento de la cadena de frío es un pilar fundamental para asegurar la calidad y seguridad de los productos acuícolas. Interrupciones térmicas, incluso por periodos breves, pueden generar pérdidas significativas debido a la proliferación de microorganismos o la oxidación de las grasas, afectando directamente la frescura del producto y su aceptación en mercados exigentes.
En palabras de Rodrigo Lazo, gerente general de Frigorífico Sake: «Mantener la cadena de frío intacta es esencial. Debemos responsabilizarnos de que la calidad de los productos de nuestros clientes sea óptima para competir como proveedor confiable de esta proteína a nivel mundial».
Los frigoríficos modernos cuentan con sistemas avanzados de monitoreo de temperatura y gestión automatizada de almacenamiento. Estos sistemas aseguran que los productos se mantengan dentro de los rangos de temperatura requeridos durante todo el proceso logístico, desde su procesamiento hasta su entrega final. En mercados como el de Japón, donde los consumidores demandan altos estándares de calidad y frescura, estas soluciones tecnológicas son una ventaja competitiva indispensable.
Además, las interrupciones en la cadena de frío también generan problemas económicos para las empresas. Los exportadores no solo pierden productos, sino también reputación y acceso a mercados. Es por este motivo que las certificaciones de los frigoríficos se vuelven una necesidad imperiosa para garantizar el cumplimiento de las normas y evitar estos riesgos, siendo estas normas como la ISO 22.000, que es un estándar internacional que establece los requisitos para gestionar la seguridad alimentaria de los alimentos a lo largo de toda la cadena, protegiendo al consumidor final; y HACCP, el cual es un estándar reconocido internacionalmente que se aplica a toda la cadena de suministro de alimentos, desde la fabricación hasta la distribución.